Muchas gracias por las camas para mi princesa viejita. Ella feliz, con sus camas, una al lado de la mía y la otra itinerante por la casa. Duerme feliz y tranquila. Es una ancianita con dificultad ya para moverse, pero adora sus camitas mullidas. Y como tiene incontinencia urinaria, le forré los rellenos en plástico y así no se mojan y el forro se lava y seca muy rápido. Agradecida de corazón.